La educación superior transnacional en México
Germán Álvarez Mendiola[1]
DIE-CINVESTAV
galvare@cinvestav.mx
Introducción
El crecimiento y la diversificación de la educación superior transnacional configuran una tendencia contemporánea de escala mundial. Aunque no existe una definición unívoca, hay cierto consenso de que se trata de cualquier provisión de educación superior, incluyendo la educación a distancia, disponible en más de un país; los estudiantes cursan estudios en un país anfitrión distinto al suyo. Esta educación es principalmente provista por instituciones establecidas en los países más desarrollados del mundo (Bennert el al, 2010). Junto con esta noción, también se han ubicado las de educación transfronteriza, educación offshore y educación sin fronteras, que se refieren a fenómenos semejantes en los cuales los límites conceptuales, disciplinarios y geográficos de la educación superior se desdibujan. Dentro de ese conjunto de conceptos, han emergido diferentes categorías, como campus remotos, sucursales, programas gemelos, programas conjuntos, doble titulación, franquicias, aprendizaje a distancia, etcétera.
En México pocas instituciones extranjeras tiene oferta educativa que provenga del o de los países de origen, por lo tanto, la provisión internacional de educación superior es muy escasa. En la mayoría de los casos, educación transnacional significa inversiones extranjeras y propiedad transnacional de instituciones de educación superior. Laureate y Apollo son las principales empresas extranjeras con inversiones en México. Son corporaciones internacionales muy grandes que compraron instituciones locales, conservando en general el modelo educativo “local” y ofreciendo titulaciones dobles e intercambios dentro de la misma red internacional. Las novedades son los programas “ejecutivos”, que es una versión compacta de los programas tradicionales.
Tras una década de notable expansión, el ritmo de crecimiento y el monto de las inversiones extranjeras en educación superior han disminuido. No obstante, en la fase actual se perciben nuevas inversiones a través de compras de instituciones existentes y, en menor medida, de la creación de nuevas instituciones o de la instalación de campus remotos y sucursales, principalmente a través de la oferta en línea.
La educación transnacional es un fenómeno que ha atraído la atención de la investigación especializada en México, por lo que la producción académica ganó peso en la década pasada. No obstante, los procesos recientes se han estudiado escasamente.[2] En este breve artículo presentaré una descripción general de la inversión extranjera directa en educación superior en México y referiré de manera sucinta las principales empresas educativas que han surgido en fechas recientes, a partir una inicial clasificación por su tamaño[3].
La inversión extranjera directa en educación superior
La inversión extranjera directa en educación (IEDE) es un fenómeno internacional relativamente nuevo. En 1990, la IEDE en el mundo apenas alcanzaba los 100 millones de dólares. Pero en 2009 llegó a cerca de 9,000 millones de dólares, de los cuales alrededor del 90% se localizaba en países desarrollados. Esa tendencia ha cambiado en años recientes, pues entre 2008 y 2010 los países en desarrollo atrajeron anualmente el 56% del total mundial de la IEDE, casi 2,000 millones de dólares destinados, en primer lugar, a proyectos nuevos (greenfield projects) y, en segundo, a fusiones y a compras (mergers and acquisitions-M&A) (Zimny, 2010). Pero en México la IED en educación superior se ha dirigido principalmente a la adquisición de instituciones existentes y a fusiones, no a la creación de nuevos proyectos. Las oportunidades de negocio, dadas las regulaciones sobre la educación superior, se presentan a través de instituciones que ya tienen presencia en el mercado nacional. Dado que en la mayor parte del mercado de la educación superior transnacional las operaciones y los productos se ofrecen en inglés, el bajo dominio de ese idioma en México, los altos costos de traducción al español y de contratación de personal de habla inglesa limitan la inversión extranjera en proyectos nuevos o en la instalación de campus satélites, dejando sólo dos opciones: la compra o la fusión de/con instituciones previamente existentes o, en el caso de proyectos nuevos, la llegada de inversiones de países de habla hispana, principalmente de España, en el mercado de la educación en línea.
En cuanto a la primera forma de inversión extranjera, se observan varias oleadas importantes en la década de 2000 a 2010. Laureate International hizo varias compras en esos años: la Universidad del Valle de México (UVM) en 2000; la Universidad Hispano-Americana (UHA) en 2004; la Universidad del Noroeste (Uno) en 2005; la Universidad del Desarrollo Profesional (UNIDEP) y el Instituto de Cultura Superior Valle del Bravo de Reynosa (UVB) en 2007; la Universidad Tecnológica (UNITEC) en 2008; y la Universidad Pro Desarrollo (UniPro)[4]. La empresa estadounidense Carlyle compró el 80% de las acciones de la Universidad Latinoamericana en 2005 y Apollo Global Education Network (propietaria de Phoenix University, la enorme universidad en línea con fines de lucro) adquirió el 65% de las acciones en 2008, quedándose Carlyle con el resto[5]. En 2008 capitales holandeses compraron la red del Instituto de Estudios Universitarios (IEU Universidad) en el sureste del país.
La segunda forma de IEDE adquirió relevancia a partir de 2010. En 2011 capital colombiano fundó el Instituto CIFE (posgrados en línea). En el mismo año, la Universidad Tecnológica Latinoamericana en Línea (UTEL), inició oficialmente sus operaciones a cargo del Grupo Guerra y en 2012 se fusionó con Pearson Group; este emprendimiento cuenta con capitales británicos y holandeses. En 2013, la Corporación Mondragón (País Vasco, España) realizó inversiones en la Universidad Contemporánea de Querétaro (UCO Mondragón). En 2014 Galileo Global Education del grupo estadounidense Providence Equity Partners adquirió el Instituto de Estudios Universitarios (IEU Universidad).
El total de las inversiones extranjeras en educación en nivel posteriores al bachillerato entre 1999 y 2014 sumó 289 millones de dólares. Por supuesto, las operaciones descritas en lo párrafos anteriores se expresaron claramente en los datos sobre IEDE en estos años. Destacaron los años 2000, con 53 millones de dólares; 2005 con 18 millones; 2008 con 166 millones; y 2013 con 14 millones de dólares (Secretaría de Economía, 2015).
Las empresas transnacionales de educación superior en México
La educación transnacional en México está sumamente diferenciada. Aunque formalmente son sociedades o asociaciones civiles (sin fines de lucro) están claramente organizadas como empresas comerciales y generan amplias ganancias, como casi todo el subsector de la educación superior privada en México. En cuanto al tamaño de las instituciones, se pueden distinguir empresas de gran tamaño, de tamaño medio y pequeñas.
Entre las empresas grandes se ubican las del grupo Laureate y las de la red Aliat ETAC. Laureate es propietaria en México de la UVM, con 38 campus o sucursales, de la UNITEC, con ocho campus y de la UNIDEP con 46 campus. Esta enorme red se encuentra ampliamente distribuida en la República Mexicana. En la red Laureate Internacional se ubican más de 1 millón de estudiantes alrededor del mundo, en 80 instituciones distribuidas en 19 países. En México, Laureate agrupa más de 142 mil estudiantes en sus programas de licenciatura y posgrado[6].
El grupo Aliat ETAC cuenta con nueve instituciones con 50 sucursales en 18 estados del país. Es un caso atípico porque en 2008 fue comprado por la empresa cervecera Grupo Modelo. Posteriormente Grupo Modelo fue adquirido por la transnacional cervecera belga-brasileña Anheuser-Busch InBev. En su sitio web Aliat ETAC dice tener 50 mil alumnos, pero en la estadística de la SEP suman 23,268.
También existen empresas de tamaño medio, aunque pueden pertenecer a grandes empresas multinacionales. Algunas son instituciones locales que fueron adquiridas por capitales extranjeros, como la ULA de Apollo Global Inc., que cuenta con 18 sucursales en ocho estados. Es de mucho menor tamaño que la red Laureate, pero muestra un crecimiento constante. Se ubica principalmente en el DF, en estados del centro del país y en Veracruz. Apollo Global reúne ocho instituciones de diversas partes del mundo y es subsidiaria de la empresa estadounidense Apollo Education Group, el cual tiene otras tres subsidiarias en el mundo. En México, la ULA cuenta con 3,400 alumnos de licenciatura y posgrado.
El IEU Universidad es también un caso de empresa de tamaño medio. Esta empresa tiene 17 sucursales en 15 estados del sur, sureste y centro del país. IED fue integrado en 2014 a Galileo Global Education, que opera en 7 países: Francia, Italia, Reino Unido, Alemania, México, China e India. Los datos de la SEP indican que esta red cuenta con 8,381 estudiantes.
La UTEL también es una empresa de tamaño medio con oferta enteramente en línea, que pertenece a la empresa Scala Higher Education S.C.. La UTEL se fusionó con el Pearson Group en 2012, el cual tiene cuatro universidades en tres países. La UTEL tiene 19 centros de atención personalizada en diferentes ciudades de México. UTEL registra 7,803 estudiantes.
Otro tipo de empresas son las de pequeño tamaño. Una de ellas es la Universidad Westhill, de origen estadounidense, que en 1992 abrió como escuela de preescolar a bachillerato. A partir de 1996 comenzó a impartir programas de profesional asociado y de 1998 programas de licenciatura. Es una institución pequeña, elitista, de no más de 470 alumnos de licenciatura y posgrado, destinada a familias de empresarios mexicanos y extranjeros y de diplomáticos.
El Centro Universitario Incarnate Word también es de pequeño tamaño, producto de la fusión del Instituto Miguel Ángel de la Ciudad de México y la University Incarnate Word de San Antonio Texas en 2002. Esta institución católica, ofrece doble titulación en sus programas e intercambios académicos dentro de la misma empresa. Esta universidad tiene 655 estudiantes.
Ya en una nueva oleada de inversiones extranjeras, en 2011 el Instituto CIFE- Ciencia e Innovación para la Formación y el Emprendimiento, de capital colombiano, inició sus operaciones en México con una sede oficial. No se anuncian como institución de educación superior sino como “centro de altos estudios en gestión del talento humano, el currículo, la didáctica, la evaluación y las tecnologías de la información y la comunicación” (http://cife.edu.mx/). Su maestría (en línea) y su doctorado (semi-presencial) cuentan con RVOE estatal. No registran matrícula ante la SEP.
La Alliant International University se fundó en México en 1970 como parte de la US International University y se fusionó con la California School of Professional Psychology. En México, a partir de los inicios de la presente década, funciona a través de la Universidad de Londres[7]. Alliant ofrece programas en inglés y provee titulaciones dobles. Alliant tienen seis campus en California, así como en Hong Kong y en Tokyo. En México, la Universidad de Londres tiene planteles en el DF y Querétaro con una matrícula de 4,528 alumnos.
En 2013, la Universidad Contemporánea ubicada en Querétaro, Qro., estableció una alianza con la Universidad Mondragón que pertenece a la Corporación Mondragón del País Vasco, España, un conglomerado de gran tamaño de empresas en diversos ramos industriales y de servicios. Este corporativo cuenta con una Red de Universidades (tres universidades en España, Colombia y México). La UCO-Mondragón ofrece programas vinculados al mundo empresarial, intercambio internacional y doble titulación. Esta universidad tiene una matrícula de 391 estudiantes.
La Universidad Internacional de la Rioja (en línea) inició operaciones en México en 2014. Forma parte de una red que cuenta con sucursales en España, Colombia, Bolivia y Argentina. Cuenta con autorizaciones oficiales en todos sus programas de licenciatura (RVOE). No existe información disponible sobre el número de alumnos que tienen en México.
La Universidad Internacional Iberoamericana (UNINI) surgió en 2010 con sedes en Puerto Rico y en México. Ofrece únicamente maestrías y doctorados en línea, a través de 43 programas (especialidades, maestrías y doctorados) en diversas áreas de conocimiento, que cuentan con autorizaciones oficiales (RVOE). La UNINI registra una matrícula de 4,229 estudiantes.
En México también están presentes verdaderas “fábricas de diplomas” que carecen de autorizaciones oficiales para operar y son potencialmente fraudulentas. Son instituciones que ofrecen cursos en línea. Varias de ellas han sido señaladas por la SEP en su sitio web como instituciones que no cuentan con reconocimiento de validez oficial (RVOE). Entre otras, se encuentran las siguientes: Atlantic International University, Pacific Western University, Endicott College, United States International University, Newport University, Westbridge University, West Coast University, Bircham International University, Vision International University, Universidad Central de Nicaragua e InterUniversity College Graz Austria.
Notas finales
En la primera década de este siglo se inició una oleada de inversiones extranjeras en educación superior. En esos años los capitales fueron cuantiosos y se destinaron principalmente a la compra de instituciones existentes con ofertas escolarizadas convencionales. Una de las inversiones, la de Laureate, constituyó y sigue constituyendo la inversión extranjera más importante y dinámica de todas las que han llegado en el nuevo periodo. En la segunda década llegaron más inversiones de más países pero de monto menor, destinadas, en unos casos, a la compra o fusión de instituciones ya establecidas y, en otros, a la instauración de nuevas instituciones principalmente con oferta en línea. Las inversiones en ofertas escolarizadas apuestan a desarrollarse con base en la demanda tradicional que no es atendida por instituciones públicas o por privadas de élite de mayor prestigio. Una parte de estas inversiones se ha dirigido a la adquisición de instituciones configuradas en red con extensa presencia en amplias regiones del territorio nacional. Las inversiones en ofertas en línea buscan generar y atraer una demanda potencial conformada principalmente por estudiantes adultos. En la mayoría de los casos, la oferta incluye la posibilidad de la doble titulación e intercambios estudiantiles, casi siempre dentro de las instituciones contenidas en su propia red internacional. Prácticamente todas las empresas transnacionales operan bajo lógicas mercantiles y muchas persiguen el lucro aunque no tengan personalidad jurídica para ello. En ese conjunto, un puñado de empresas que ofrecen cursos en línea carecen de autorizaciones oficiales, tienen publicidad engañosa y pueden constituir una estafa académica.
Referencias
Buendía, Espinosa, Angélica (2012). “Change or continuity in the Mexican private sector? The case of Laureate –The University of the Valley of Mexico”, en Schuetze, Hans y Álvarez Mendiola, Germán (eds.). State and Market in Higher Education Reforms. Trends, Policies and Experiences in Comparative Perspective. Rotterdam, Sense Pubs., pp. 79-95.
Buendía Espinosa Angélica (2014). La FIMPES y la mejora de la calidad en instituciones privadas Cambio, prestigio y legitimidad. Tres estudios de caso (1994-2004). México, ANUIES.
Didou, Sylvie (2012) “Markets and Higher Education in Mexico and Latin America”, en Schuetze, Hans G. y Álvarez Mendiola, Germán (eds.) State and Market in Higher Education Reforms. Trends, Policies and Experiences in Comparative Perspective. Sense Publishers, Rotterdam, pp. 57-67.
Sylvie Didou (2015). “Fourniture transnationale de services d’enseignement supérieur en Amérique latine Une première approche de ce phénomène”. Revue Tiers Monde (3: 223) pp. 111-126.
Rodríguez, Gómez Roberto (2007). “Presente y futuro de la universidad Transnacional en México”. Primera, Segunda y Tercera parte, Campus Milenio, No. 235, 236 y 237 (9 de julio,16 de agosto y 23 de agosto) Disponible en: http://www.ses.unam.mx/publicaciones/articulos.php?proceso=busquedap&autor=12.
Secretaría de Economía (2015). Flujos totales de IED hacia México por tipo de inversión, país de origen, sector económico y entidad federativa de destino (1999-2015). Disponible en: http://catalogo.datos.gob.mx/dataset/inversion-extranjera-directa/resource/d52e717b-a7c9-4555-8238-5f4de6651623.
Zimny Zbigniew (2010). Foreign direct investment in education. Background paper prepared for UNCTAD (Available at: http://papers.ssrn.com/sol3/Delivery.cfm/SSRN_ID2433876_code2167674.pdf?abstractid=2433876&mirid=1)
[1] Trabajo realizado en el marco de la Red sobre Internacionalización y Movilidades Académicas y Científicas (RIMAC), Proyecto de Redes Temáticas CONACYT no. 260402.
[2] Sylvie Didou (2015) ha retomado el tema en su reciente artículo “Fourniture transnationale de services d’enseignement supérieur en Amérique latine Une première approche de ce phénomène”.
[3] Este recuento se basa en una revisión de la literatura y en una indagación a través de internet. Aunque es un apunte inicial que probablemente haya excluido involuntariamente otras inversiones transnacionales, incluye las operaciones más importantes.
[4] No hemos situado la fecha exacta de compra de la UniPro ni la fecha de su absorción por parte de UNITEC, pero esas operaciones ocurrieron entre 2007 y 2008.
[5] La llegada de capitales extranjeros en el mercado de la educación superior mexicana fueron analizados por Rodríguez (2007) y por Didou (2012, 2015). El caso de Laureate también ha sido estudiado por Buendía (2012 y 2014).
[6] Salvo indicación en contrario, los datos de matrícula provienen de la Secretaría de Educación Pública (formato 911) y fueron obtenidos a través de los Anuarios Estadísticos de la ANUIES.
[7] No he localizado el año en que se concretó la alianza entre la Universidad de Londres y la Alliant International University, pero por la fecha de los RVOES de sus programas académicos es posible que haya sido alrededor de 2012.
Texto disponible en PDF: Opinion-GermanAlvarezMendiola